MANUAL PARA DEPRESIV@S (Primera parte)

MANUAL PARA DEPRESIV@S 

(Primera parte) 

  

INTRODUCCIÓN

En esta primera entrega haremos un acercamiento inicial del problema de la depresión o distimia, desde diferentes perspectivas, para luego ir profundizando en su resolución definitiva en las próximas entregas y sobre este particular comenzaremos por afirmar con absoluta propiedad que la depresión crónica es curable en su totalidad por métodos naturales y que definitivamente no es una enfermedad sino un síntoma, es un persistente “bache emocional extremo” a causa de uno o varios factores externos. En pocas palabras, es el síntoma de una mala experiencia reciente y conocida o de un trauma remoto y DESconocido guardado en el subconsciente y que grita por sanar.

Seguimos... la depresión es una condición, es una amplificada, obsesiva y crónica tristeza, es en suma, una expresión neurótica más, que nos viene a tocar en primera instancia la puerta del cambio interno, y que al tratarla como una enfermedad, se queda flotando y paralizada en la superficie de su complejidad, haciendo de la vida de quién la padece, una suerte de círculo vicioso girando constantemente en modo carrusel de caballitos de feria que le mantiene prisioner@ y en estado de parálisis existencial, pues no estamos atacando directamente a la causa de la enfermedad en sí, sino al síntoma.

Es decir que, si no sanamos la raíz o la causa remota, experimentaremos cuadros cada vez más dramáticos que nos llevará a dos caminos, repetimos: ¡Nos llevará irremediablemente a dos caminos! O sanamos definitivamente, o sucumbimos hacia peligrosas áreas de sufrimiento cada vez más oscuras, por no entender la primera campanada de aviso, lo cual nos puede llevar a la muerte física prematura puesto que ya en este estado, estamos emocionalmente muertos en vida.

Para hablar de la depresión con propiedad y credibilidad, es imprescindible haberla padecido, entendido y superado o estarla padeciendo y estar en proceso de superación definitiva, de allí que nos lanzamos a esta aventura de elaborar en serie, un “Manual para Depresiv@s” como un servicio a la humanidad. 

Así pues, desde nuestra historia, nuestra perspectiva, nuestra investigación y sobre todo desde nuestra profunda experiencia de años, vamos a ir encadenando coherentemente este fenómeno que tiene de cabeza a toda la sociedad, pues de la neurosis colectiva mundial, la depresión es la manifestación más extendida, tan es así que últimamente la neurosis ha sido bautizada irónicamente como “normosis” ya que ha sido aceptada por una gruesa mayoría de la sociedad como un estado “normal”, lo cual la hace más subterránea, acechante y peligrosa.

Debemos aclarar que no vamos a entrar en materia de clasificación de la depresión, primero porque en internet hay suficiente y amplia información al respecto, en segundo lugar, porque es mucho más práctico abordar en forma holística esta entidad y en tercer lugar, porque no deseamos hacer de este manual un extenso tratado clínico más, de los tantos que hay, sino algo sencillo, útil, de fácil comprensión y abordaje. Simplemente daremos las mínimas bases teóricas necesarias, sin extendernos mucho.    

Para no dejar espacios vacíos haremos el siguiente inciso: 

¿Qué es la neurosis?

La palabra neurosis es muy antigua y fue popularizada en esta época contemporánea por el destacado psicoanalista e investigador Sigmund Freud. La misma, fue y sigue siendo utilizada hoy día, para designar un estado general de ansiedad emocional, cuyas manifestaciones incluye una larga lista de manifestaciones en donde la depresión está estadísticamente a la cabeza, seguida de fobias, compulsiones de todo tipo, pensamientos negativos recurrentes, obsesiones, toda forma de adicciones, insomnio o exceso de sueño, migrañas, apatía, mareos, pérdida de la memoria, desubicación temporo-espacial, exceso o falta de apetito, severos problemas digestivos que incluyen a las diarreas, fiebre, dolores corporales, obesidad mórbida o anorexia, fibromialgias, agotamiento o Síndrome de Fatiga Crónica, falta de sentido de la vida o "vacíos existenciales", "crisis de identidad", frigidez, baja de la líbido o impotencia sexual, problemas menstruales, los mal llamados trastornos bipolares, déficit de atención (TDA) o déficit de atención acompañado de hiperquinesia (TDAH), el autismo, la esquizofrenia, psicosis, asperger, etc., y/o todas esas condiciones mentales, combinadas o no, que no concuerdan con los patrones de conducta establecidos por el actual orden social.

Además de lo anterior, la neurosis, y por supuesto, la depresión como su hija predilecta, produce desórdenes psicosomáticos, es decir, enfermedades emocionales que se manifiestan como enfermedades físicas de cualquier índole y gravedad, que van desde un simple cuadro gripal recurrente, hasta llegar a las más graves como los clásicos problemas cardíacos, el cáncer en sus distintas manifestaciones (hay más de 200 tipos de cáncer), decenas de enfermedades degenerativas y una larga lista que sigue creciendo día a día, ya que la neurosis vulnera abiertamente nuestro sistema inmunológico, disminuyendo sensiblemente nuestras defensas, y en muchos casos las destruye completamente dejándonos a merced de cualquier enfermedad.

Si nos tocara definir a la neurosis en forma rápida y sencilla, diríamos que:

La neurosis es el miedo que genera un cuadro de ansiedad pura y la ansiedad pura es la más absoluta incapacidad de disfrutar el presente real, por sentirnos culpables por un pasado que no podemos cambiar, inconformes con un presente que no llena nuestras expectativas y miedosos por las expectativas de un futuro incierto que jamás llegará.

Inspirados en el Dr. Grover Boydston, psicólogo clínico y cofundador de Neuróticos Anónimos, enunciaremos una segunda definición aún más concisa y bien profunda:

"La neurosis, es la incapacidad de amar a causa del miedo innato mal canalizado".

Como habrán podido observar, la neurosis, también llamada por Eckhart Tolle "La enfermedad del alma", es la causante de todos nuestros males, incluyendo la distorsionada percepción de la realidad, es por esto que la neurosis está catalogada como la enfermedad del siglo XXI, aunque nos haya venido acompañando en forma invisible desde tiempos hipocráticos y más atrás, sólo que antes la llamaban histeria o posesiones demoníacas y los tratamientos eran muy folklóricos, por decir lo menos. 

Fuente: https://caminohacialafuente.blogspot.com/2017/09/si-la-matrix-esta-enferma-nosotros_12.html

Retornando a la depresión, por ser ésta una condición de origen multifactorial, los resortes externos e internos que catapultan la aparición en escena de este fenómeno son innumerables por no decir infinitos, en consecuencia, la cura de la depresión también debe ser basada en una estrategia multifactorial y no debe ser abordada únicamente desde el punto de vista científico o clínico, dado que es una visión hipermiope del síntoma, y su tratamiento medicamentoso lo único que logra es un “alivio temporal" y enmascarar sus raíces principales, bloqueando así el hilo conductor que nos llevará a la raíz o a las verdaderas raíces germinales de esta condición, una vez que hayamos decidido resolverla definitivamente en forma holística.

Si eres depresiv@ y te has identificado con esta introducción, seguramente abrigarás muchas expectativas. Sin embargo, por ser un tema tan delicado y prácticamente de vida o muerte, decidimos realizar artículos cortos para no arriesgarnos a causar fatiga intelectual y que no llegue el mensaje en la profundidad deseada. Debemos ser responsables en el desarrollo de esta materia de salud pública y para ello haremos una labor de escritura quirúrgica progresiva, sin bisturí y paso a paso. Así que iremos desarrollando este trabajo por partes, para finalmente hacer un verdadero manual con una recopilación ampliada y actualizada más completa.

Podemos concluir esta introducción, reiterando y resumiendo los puntos más resaltantes, que son:

1.- Que la depresión no es una enfermedad, sino un síntoma.

2.- Que la depresión es una compleja entidad que se alimenta de cuatro vertientes como son: la física, la mental, la emocional y la espiritual, y como tal, su cura debe involucrar a estos cuatro factores para tratarla y superarla en forma integral y definitiva.

3.- Que sus disparadores pueden ser de causa reciente conocida o de traumas remotos desconocidos.

4.- Que el tratamiento farmacológico de la depresión es de sostén temporal pero no resuelve en forma definitiva este gravoso síntoma.

5.- Que la depresión es una forma más de neurosis y la neurosis es la causa de todos nuestros males.

6.- Que la depresión es 100% curable por medios naturales, alternativos u holísticos y que para sanarla, primero debemos encontrar  y recopilar todas las piezas del rompecabezas o puzzle que la ocasionan, para luego proceder a ordenarlas y armarlo completamente, a fin de desarrollar, vías, rutas, caminos, mapas y estrategias certeras para finalmente proceder a la sanación definitiva, cuestión que abordaremos progresivamente en las próximas entregas...

Gracias por su participación.

Vedanta-Colibrí